ES LO QUE TIENE IR A TORTOSA. HAY QUE COMPETIR.
Cuando salieron los sorteos de la Copa de España Infantil de este fin de semana, los padres y alumnos me dijeron, que “vaya sorteo nos había tocado”. Lo decían por la dificultad y nivel de nuestros rivales en primera ronda del torneo. Empezaron a aparecer dudas, nervios, presión y recuerdo que cuando la información me la mandó una mamá por whatsapp, le contesté: “es lo que tiene ir a Tortosa. Hay que competir”.
Hace tiempo que tengo muy claro el trabajo que estamos realizando y sé lo que estamos trabajando, las horas que estamos metiendo, la gente que estamos implicados en este proyecto y sé que hay mucho judo metido en nuestros judokas y que aún queda mucho más por meter y bastante margen de mejoría. Podrá o no, salir, pero las bases están. Con esas premisas os aseguro que sabía que teníamos muchas opciones de hacer un buen papel, y que aunque o hubiera sido así, seguro que hubiésemos avanzado. Cuando estaban Daniel y Lucía en los instantes previos a salir al tapiz, recuerdo que a ambos les dije. Hacia atrás nunca. Siempre hacia delante y si retrocedes que sea para coger más impulso para delante. Y eso fue lo que hicieron.
Daniel, acudía como líder del ránking nacional, con la intención de sumar el máximo de puntos y asegurar, si es que no estaba asegurada ya, su plaza directa para el Campeonato de España Infantil y Cadete que se disputará en Mayo en Talavera de la Reina. No fue el mejor día de Daniel, él mismo lo reconocía. La presión hizo mella en su judo y la desconfianza le abordó en varias fases de la competición. Sacó sus combates como había que hacerlo, luchando contra sus rivales, pero sobre todo contra su mente. Decía un gran campeón que cuando salen los días malos hay que ganar dos veces, en el tatami y en la cabeza y ese fue el éxito de Daniel. Judo tiene, recursos también y así se vio el sábado en su primer combate donde con una eficaz acción, superó a su rival. En semifinales, algo más relajado tardó en encontrar el momento, pero con otra genialidad marcó e inmovilizó a su contrincante, metiéndose merecidamente en la final. La final fue tremebunda, el ansia y el desorden en ocasiones, le hicieron cometer errores que le costaron shidos, pero cuando más difícil lo tenía, una brillante acción y ahora con las ideas más centradas, superaba a su rival y se alzaba con la medalla de oro de forma merecida. Una medalla de oro, de gran valor no sólo por lo excelente del resultado sino por la calidad de sus rivales, que aún le dan más valor. Objetivo cumplido, confianza a tope y TRABAJAR, TRABAJAR Y TRABAJAR, para seguir aprendiendo judo, nuestro gran objetivo en el club, medallas aparte. ENHORABUENA, DANIEL, POR ESTE TEMPORADÓN DE ORO.
Por el otro lado, Lucía Plou, acudía al campeonato como debutante, con el objetivo de aprender y sumar experiencias, para un futuro que seguro que va a ser muy prometedor porque el trabajo, dedicación y sacrificio de esta joven judoka es de diez. Realizó dos combates, y en los dos salió derrotada. Me gustó más el segundo porque a pesar de ser de Repesca y jugárselo a una sola carta, salió con confianza, a luchar y a hacer judo y eso fue lo que ví. Empecé a ver orden, trabajo de agarres, desplazamientos y a punto estuvo de llegar la victoria en dos grandes acciones que casi se transforman en puntuación. No pasa nada. Una gran experiencia, una gran motivación y muchas las ganas que ví en su cara de volver el martes al club, para seguir entrenando y avanzando, con lo cual, objetivo cumplido y muy orgulloso de la actitud de mi alumna. Tiempo al tiempo. BRAVO POR LUCÍA!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
No me puedo olvidar de dos COMPAÑEROS CADETES, con mayúsculas; Iván González y María Murillo que con la humildad que les caracteriza supieron estar ahí, al servicio de os más pequeños, ayudándoles en el calentamiento, en los previos a sus combates y realizando una labor de acompañamiento BESTIAL. GRACIAS CHICOS, SOIS EXTRAORDINARIOS!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
Agradecer a los padres su trato y los detalles que tuvieron conmigo, me hicieron sentir muy a gusto y pasé con ellos unas jornadas extraordinarias, haciéndome fácil mi labor profesional y mi sacrificio personal. Gracias familias, Murillo y Plou.
Y es que ES LO QUE TIENE IR A TORTOSA. HAY QUE COMPETIR.
